La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dio cuenta en Bruselas del paquete de medidas que ha estado preparando el organismo comunitario para hacer frente al alto coste de la energía. Lo hace, entre otras propuestas, con el tope al precio del gas ruso, limitar los beneficios de las compañías energéticas o establecer una reducción obligatoria del consumo de electricidad en los picos de mayor demanda de al menos un 5%.
«Debemos recortar los ingresos de Rusia que Putin utiliza para financiar esta atroz guerra en Ucrania».
Así lo ha señalado la presidenta de la CE, en una rueda de prensa que precede el encuentro de este viernes entre los ministros de Energía de la Unión Europea: «Propondremos un límite al precio del gas ruso. Debemos recortar los ingresos de Rusia que Putin utiliza para financiar esta atroz guerra en Ucrania», ha recalcado.
Límite al precio del gas ruso
Ursula von der Leyen ha justificado el planteamiento de la medida contra Rusia: «Nos enfrentamos a una situación extraordinaria porque Rusia es un proveedor poco fiable y está manipulando nuestros mercados energéticos… Pero nuestra unidad y nuestra solidaridad asegurarán que prevaleceremos».
«Reducción inteligente de la demanda»
En cuanto a la reducción del consumo en las horas de mayor demanda, la presidenta de la CE ha insistido en la «reducción inteligente de la demanda». «Necesitamos una estrategia para aplanar los picos que impulsan el precio de la electricidad», ha afirmado.
En referencia al límite de los beneficios de las empresas productoras de energía. El paquete de medidas de la CE pone en el foco a aquellas empresas que han obtenido «ganancias masivas» debido a la subida de precios. Además de anunciar esta medida, la presidenta ha afirmado que la propuesta de la Comisión Europea irá encaminada a «reencauzar estos beneficios inesperados para ayudar a las personas y empresas vulnerables a adaptarse».
«Estamos en un escenario en el que la energía se usa como arma de guerra».
Para la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, las medidas de la CE se tratan de «una respuesta cogerente y esperable anticipadamente». «Estamos en un escenario en el que la energía se usa como arma de guerra y, por tanto, es congruente que, por su parte, se duplique la apuesta en términos de amenaza», ha recalcado.
La Comisión Europea se inspira en buena medida en el pacto conseguido por el G-7 hace unos días. Los países del G-7 pactaron dar una nueva vuelta de tuerca a las sanciones a Rusia por invadir Ucrania. Entre las medidas más llamativas se encuentra la limitación del precio del petróleo ruso. Una medida que Ursula von der Leyen apoyó y que consideró necesario extenderla al gas.