Los intensos bombardeos de Israel sobre el sur del Líbano han dejado un saldo de al menos 569 muertos y 1.835 heridos en las últimas 48 horas, en un recrudecimiento de la violencia que ha forzado a miles de libaneses a abandonar sus hogares. Entre las víctimas mortales se cuentan 94 mujeres y 50 niños, un número que supera ampliamente al de los fallecidos en los 11 meses anteriores de enfrentamientos entre Israel y Hezbolá. La aviación israelí ha centrado sus ataques en objetivos de Hezbolá, incluyendo lanzaderas de misiles y depósitos de armas, según informó un portavoz del ejército israelí.
Hezbolá ha intensificado su respuesta lanzando más de 300 cohetes contra el norte de Israel, en la que ha sido su ofensiva más intensa desde el inicio de esta escalada bélica. Los cohetes han provocado la activación de las alarmas antiaéreas en ciudades como Haifa, Safed y Nazaret, e incluso tres drones sobrevolaron el sur de Haifa. Aunque la mayoría de los proyectiles fueron interceptados, algunos alcanzaron zonas del norte de Israel, donde causaron daños materiales. Este aumento en la presión militar ha llevado a las autoridades israelíes a suspender las clases escolares en gran parte del norte del país.
Desplazamiento masivo de personas refugiadas
La situación en Líbano es cada vez más crítica. En la carretera de la costa, entre Beirut y Tiro, se observan desplazamientos masivos de personas que buscan refugio en la capital. Familias enteras, con sus pertenencias a cuestas, transitan por las carreteras colapsadas, mientras los servicios de emergencia luchan por atender a los heridos. La falta de combustible en las estaciones de servicio agrava aún más la situación, y muchos vehículos se ven abandonados en los arcenes tras quedarse sin suministro. El gobierno libanés ha habilitado 87 escuelas para acoger a los desplazados, aunque la mayoría opta por refugiarse en casas de familiares y conocidos.
En este contexto, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, no ha descartado una invasión terrestre de Líbano y ha afirmado que ya hay “golpes adicionales preparados” contra Hezbolá. Gallant ha destacado la experiencia adquirida por las tropas israelíes en la Franja de Gaza, al tiempo que miles de efectivos de varias divisiones se preparan para una posible incursión terrestre.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dirigió un mensaje a la población libanesa instándola a evacuar las viviendas que puedan Hezbolá pueda utilizar, advirtiendo que “quien tenga un misil en el cuarto de estar y un cohete en el garaje ya no tendrá casa”. Esta advertencia refuerza la postura de Israel de intensificar sus bombardeos sobre las posiciones de Hezbolá en Líbano.
Escalada del conflicto
La escalada del conflicto ha llevado a varias aerolíneas internacionales, como Air France-KLM, Air Algerie y Air Arabia, a cancelar sus vuelos desde y hacia Beirut, e incluso Tel Aviv. El portavoz de seguridad nacional de Estados Unidos, John Kirby, ha instado a los ciudadanos estadounidenses en Líbano a abandonar el país mientras todavía haya vuelos comerciales disponibles. España también ha anunciado preparativos para una posible evacuación de sus nacionales, incluidos los soldados desplegados con la Fuerza Interina de Naciones Unidas para Líbano (FINUL).