El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha expresado su preocupación al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtiéndole sobre las consecuencias de un posible ataque en Rafah, Gaza. La llamada telefónica de 45 minutos se produce en un momento de tensión entre ambos países, marcado por discrepancias en torno a la ayuda humanitaria y la gestión del conflicto. Biden ha señalado que una gran operación militar en la zona solo aumentaría el sufrimiento de los civiles inocentes y empeoraría la crisis humanitaria ya catastrófica. Además, ha advertido sobre el riesgo de profundizar la anarquía en Gaza y de aislar internacionalmente a Israel.
Como resultado de la conversación, Israel enviará una delegación a Washington para discutir alternativas a la invasión planeada en Rafah y explorar formas de desarticular a Hamás sin recurrir a medidas extremas. La muerte de uno de los líderes de Hamás, Marwan Issa, en una operación israelí ha sido confirmada, lo que evidencia la intensidad del conflicto. Netanyahu, por su parte, ha manifestado el compromiso de Israel con sus objetivos en la guerra, incluida la eliminación de Hamás y la seguridad de la región, al tiempo que asegura la entrada de ayuda humanitaria necesaria.
Críticas internacionales a Israel
El contexto de la llamada refleja un distanciamiento creciente entre Estados Unidos e Israel, exacerbado por las críticas internacionales a la actuación israelí en el conflicto. Las tensiones se han agudizado aún más tras el discurso del líder demócrata Charles Schumer, quien abogó por elecciones anticipadas en Israel y advirtió sobre el riesgo de un aislamiento internacional del país. Este malestar se suma a una serie de declaraciones de Biden expresando su descontento con la gestión israelí de la guerra en Gaza y la necesidad de una acción más humanitaria y diplomática.
Mientras tanto, la situación en Gaza sigue siendo crítica, con el ejército de Israel invadiendo nuevamente el hospital Al Shifa y reportando la eliminación de terroristas. Hamás ha informado de muertes y heridos en el ataque, agravando la ya precaria situación de los residentes en la zona.