Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea y candidata del Partido Popular Europeo (PPE) para repetir en el cargo, está ajustando su estrategia política de cara a las próximas elecciones al Parlamento Europeo. Después de meses de coqueteos con la primera ministra italiana Giorgia Meloni y su grupo parlamentario, los Reformistas y Conservadores Europeos (ECR), Von der Leyen ha decidido volver a enfocarse en fuerzas más moderadas y europeístas como Los Verdes y alejarse de la extrema derecha.
La decisión de Von der Leyen responde a las señales de los sondeos recientes, que indican que tanto Los Verdes como los liberales del grupo Renew no perderán tantos apoyos como se temía. Este escenario abre la posibilidad de reeditar una gran coalición moderada con socialdemócratas, similar a la que ha mantenido la estabilidad de la UE durante las últimas décadas.
El acercamiento de Von der Leyen a la extrema derecha
La presidenta del Ejecutivo comunitario, que recibió crí por su acercamiento a la ultraderecha, ve ahora en Los Verdes una opción más confiable para asegurar su investidura. Los ecologistas, que se abstuvieron en la votación de confirmación de Von der Leyen hace cinco años, podrían esta vez apoyarla para evitar alianzas con fuerzas ultras, según Philippe Lamberts, expresidente del grupo verde en el Parlamento Europeo.
A cambio del apoyo de Los Verdes, Von der Leyen tendría que comprometerse a impulsar la agenda verde, una prioridad al inicio de su mandato pero que ha sido relegada por presiones de la derecha y la industria. Con los recientes sondeos y la presión de Los Verdes y los socialdemócratas, la presidenta podría retomar su enfoque ecologista, aunque buscando separar las cuestiones agrícolas para apaciguar las protestas del sector.
La situación política en Europa es extremadamente volátil, con movimientos significativos de figuras como Marine Le Pen y Viktor Orbán que podrían complicar el panorama parlamentario para Von der Leyen. A pesar de las dificultades, la presidenta no descarta alianzas con partidos como el de Meloni para regulaciones específicas, según fuentes parlamentarias conservadoras.
La inquietud crece entre los miembros del PPE, con figuras destacadas como Jean-Claude Juncker alertando contra las alianzas con la ultraderecha. Los recientes guiños de Von der Leyen a estos partidos han despertado críticas internas y externas, destacando la necesidad de diferenciarse de la ultraderecha y mantener los valores democráticos e inclusivos de la UE.