Reino Unido vive el segundo cambio al frente del número 10 de Downing Street desde septiembre. Tras la llegada de Liz Truss en sustitución de Boris Johnson, Rishi Sunak es el nuevo primer ministro, un mes y medio de ambiciosas medidas y sendas dimisiones de carteras ejecutivas que pusieron en jaque la economía británica. A su vez, el extitular de Economía del gobierno de Johnson, de origen indio, se convierte en el primer ministro más joven con 42 años.
Se cumple así el deseo de la mayoría de los parlamentarios ‘tories‘, que tenían en la figura Sunak su candidato favorito para suceder a Boris Johnson. Pese al triunfo posterior de Truss gracias a la militancia, ha sabido estar agazapado hasta que llegó su momento, propiciado por el paso en falso de Boris Johnson, que anunció a última hora de la noche del domingo, fecha límite, la decisión de no concurrir a las primarias del Partido Conservador.
Del ‘Partygate’ al ambicioso plan de Truss
La controversia del ‘Partygate‘ de Boris Johnson recibió el reemplazo del polémico y ambicioso plan que Truss quiso llevar a cabo para paliar la crisis económica en Reino Unido, en el que incluía una bajada masiva de impuestos. El paquete de medidas anticrisis propuesto por la ex ‘premier‘ no fue bien recibida por los mercados, tampoco por el Banco de Inglaterra y obligó a la británica a recular días después.
Su llegada al máximo órgano dirigente de Reino Unido se ha producido con incertidumbre. Primero fue la negativa de Boris Johnson a última hora de concurrir a las primarias. Después de este movimiento, el camino de Rishi Sunak se despejó por completo ya que la exministra Penny Mordaunt, quien parecía candidata a rivalizar con él, no ha reunido a tiempo los cien avales necesarios para poder presentarse a los comicios internos.
«Necesitamos estabilidad y unidad»
“El Reino Unido es un gran país, pero no hay duda de que nos enfrentamos a un desafío económico profundo”, ha dicho en su primera intervención ante los medios, con los ciudadanos —y los votantes conservadores— como sus principales destinatarios. “Necesitamos estabilidad y unidad. Y haré que mi prioridad absoluta sea reunificar a nuestro partido y al país (…) Me comprometo a servir en el cargo con integridad y humildad”, aseguraba Sunak, después de rendir tributo a su malograda predecesora, Liz Truss.