Rusia ha intensificado su ofensiva aérea contra Ucrania con una nueva fase de ataques masivos, que en los últimos días ha batido récords en el uso de drones bomba de largo alcance. Según las Fuerzas Aéreas de Kiev, durante la madrugada del domingo al lunes, se lanzaron 355 drones Shahed en un solo bombardeo. Esta cifra, inédita en los más de tres años de guerra, se suma a más de un millar de drones y decenas de misiles disparados en apenas tres días. El objetivo de esta ofensiva, explican tanto analistas militares como fuentes oficiales ucranianas, es múltiple: debilitar las defensas antiaéreas, minar la moral de la población en Ucrania y preparar el terreno para una ofensiva terrestre a gran escala, que podría comenzar en junio.
El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) sostiene que estas acciones forman parte de una estrategia prolongada de desgaste y persuasión dirigida también a la comunidad internacional, para sembrar la percepción de que una victoria rusa es inevitable.
Ofensiva de Rusia
Rusia ha mejorado significativamente sus capacidades ofensivas. Los drones Shahed ahora vuelan a mayor altitud y emplean inteligencia artificial en lugar de sistemas GPS, lo que dificulta su interceptación. Además, los misiles balísticos Iskander han recibido modificaciones para seguir trayectorias impredecibles y esquivar radares, según detalló el portavoz de las Fuerzas Aéreas de Ucrania, Yuri Ignat.
El uso de misiles norcoreanos de corto alcance, como los KN-23, también fue confirmado. Las defensas antiaéreas ucranianas, especialmente los sistemas Patriot, operan cerca de sus límites, y la falta de nuevas entregas por parte de Estados Unidos podría agravar esta situación en julio.
Por otro lado, Kiev ha recibido una noticia favorable con la inminente entrega de 24 cazas F-16 por parte de Países Bajos, lo que refuerza su capacidad de defensa aérea. Además, en los últimos ataques rusos no se han identificado daños significativos a la red energética ucraniana, lo que indica que, por el momento, ese sector no está siendo un objetivo prioritario.
Pese al recrudecimiento de los ataques, Ucrania mantiene su capacidad de respuesta y la moral intacta. Drones ucranianos han alcanzado en las últimas horas instalaciones militares en Tartaristán e Ivanovo, recordando que, aunque en desventaja material, Ucrania conserva su capacidad ofensiva a larga distancia.