El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha pronunciado un discurso a tres días del aniversario de la invasión de Ucrania, que ha sido seguido con lupa en todo el mundo por el devenir de la guerra. Ante la expectativa de anuncios drásticos, el mandatario ruso ha declarado ante la nación que “Rusia superará paso a paso, cuidadosa y continuamente, los desafíos con los que se encuentre. (…) No se puede vencer a Rusia en el campo de batalla”.
A su vez, Putin también anunció que Rusia suspende su participación en el nuevo tratado START, acuerdo para auto limitar el número de misiles nucleares con Estados Unidos. El nuevo tratado START limita la cantidad de ojivas nucleares estratégicas que Estados Unidos y Rusia pueden desplegar, así como el despliegue de misiles y bombarderos terrestres y submarinos para lanzarlos.
Tal y como publica La Vanguardia, según el discurso oficial de Rusia, la guerra con Ucrania comenzó en 2014 en el Donbass ucraniano, que incluye las provincias de Luhansk y Donetsk. La «operación militar especial», como la llama Moscú, es una intervención rusa para defender a la población de esa región del «genocidio» orquestado por el «régimen de Kyiv».
«Ellos empezaron la guerra y usamos la fuerza para detenerla».
Vladimir Putin ha acusado a Occidente de avivar la guerra con Ucrania para acabar con Rusia «para siempre». «Occidente está hablando de democracia pero trata de imponer sus valores totalitarios», manifestó. «Ellos empezaron la guerra y usamos la fuerza para detenerla».
Aunque debe ser un acontecimiento anual, recogido en la Constitución de Rusia, Putin no se dirigió a la Asamblea Federal en 2022. La última vez que lo hizo fue en abril de 2021. La sesión se aplazó varias veces el año pasado debido a su «apretada agenda», argumentó su portavoz, Dimitri Peskov.