El influyente CEO de Tesla, SpaceX y Twitter, Elon Musk, ha completado una visita crucial a China, durante la cual se reunió con importantes autoridades locales y discutió planes de expansión para sus empresas. Según El País, Musk, que tiene una presencia considerable en el gigante asiático, se reunió con el canciller chino, Qin Gang, en la sede oficial de Beijing.

Fuentes cercanas a la reunión sugieren que China se comprometió a «crear un mejor entorno empresarial orientado al mercado, basado en el Estado de derecho e internacionalizado» para las empresas extranjeras. Este compromiso podría fortalecer la confianza de los inversores globales en el entorno empresarial chino.

Segunda fábrica de coches eléctricos en China

Musk, a su vez, aprovechó la oportunidad para anunciar planes para abrir una segunda fábrica de coches eléctricos en China, en un intento de expandir aún más sus operaciones en el país. Esta expansión se produce en un contexto de creciente competencia de los fabricantes de automóviles chinos, que recientemente han superado a Japón en volumen de exportación.

En el ámbito de la inteligencia artificial, Musk reveló su proyecto TruthGPT, el cual, según Musk, buscará la «verdad absoluta», evitando «las tendencias a la corrección política» y buscando «comprender la naturaleza del universo». Esta iniciativa podría verse como un desafío a los esfuerzos de gigantes tecnológicos como Microsoft y Google en el espacio de la inteligencia artificial.

Tensión con Estados Unidos

La visita de Elon Musk a China llega en un momento crítico, con las tensiones entre Washington y Pekín en un punto bajo debido a las disputas comerciales y tecnológicas. Tal y como publica Ámbito, Musk ha asumido en cierta medida el papel de mediador durante su visita, buscando mantener «el volante en la dirección correcta de respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación beneficiosa para ambas partes», tal y como se le solicitó durante su encuentro con el canciller chino.

Durante las reuniones, se mencionaron frecuentemente Tesla y el sector de vehículos eléctricos, lo que refleja la importancia que China está dando a la industria de la energía renovable. En este contexto, China ha reiterado su llamada a los inversores extranjeros, en un momento en que su economía sigue luchando por recuperarse tras la crisis del covid.

El ministro de Exteriores aseguró a Musk que el desarrollo de China «es una oportunidad para el mundo» y destacó la «apertura de alto nivel» de China a las empresas internacionales, en particular, al floreciente sector de los vehículos eléctricos. Las relaciones comerciales entre China y Estados Unidos han sido tensas, pero la visita de Musk a China podría ser un signo de un posible «deshielo». Sin embargo, aún queda por ver cómo se desarrollará la relación