El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha hecho una afirmación contundente sobre los planes de Israel para el futuro de la región. En sus declaraciones más recientes, Netanyahu ha proclamado que Israel mantendrá un control continuo sobre la seguridad en Gaza, incluso después de que la operación militar termine.
Según informes recientes, la invasión terrestre y los bombardeos han dejado un saldo desgarrador de más de 10.000 muertos, principalmente mujeres y niños, junto con un desplazamiento masivo de la población y una crisis humanitaria de proporciones colosales, según la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, la UNRWA.
Netanyahu ha dejado la puerta abierta a varias opciones, mencionando la posibilidad de una presencia continua de tropas, incluida una fuerza multinacional que Estados Unidos está considerando en sus conversaciones con aliados.
Se espera que Israel no busque reinstaurar el régimen previo a 2005, cuando retiraron a sus soldados y colonos de Gaza. Sin embargo, el ejército israelí tiene la intención de mantener la capacidad de realizar incursiones, asesinatos selectivos y arrestos cuando lo consideren necesario.
Crisis humanitaria en Gaza
La incertidumbre y la devastación continúan en la Franja de Gaza, donde los residentes se ven obligados a escapar a pie, cargando consigo solo lo esencial para su supervivencia. Los informes de la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU revelan que casi la mitad de los edificios en toda la región han sido afectados, con más de 40.000 completamente destruidos y otros 220.000 dañados en diferentes grados.
A pesar de los esfuerzos de Israel por abrir un «corredor humanitario» para permitir que los civiles escapen, muchos han expresado su temor debido a los continuos bombardeos y la presencia del ejército israelí en la región.
La postura de Israel plantea una incertidumbre persistente sobre el perseguido control del futuro de Gaza y sus habitantes, con preocupaciones crecientes en la comunidad internacional sobre la viabilidad y sostenibilidad de este enfoque. Mientras tanto, varios líderes mundiales y organizaciones humanitarias instan a un diálogo diplomático urgente y a una solución pacífica y duradera que aborde las necesidades humanitarias inmediatas y promueva una resolución política integral para la región.