Donald Trump ha emergido victorioso en las primarias republicanas de Nuevo Hampshire, obteniendo más del 54% de los votos y superando a la exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, quien logró el 43.1%. Con el 91% de los votos escrutados, Trump celebró su éxito frente a sus seguidores, destacando la debilidad percibida del presidente Biden.
Nikki Haley, a pesar de felicitar a Trump por su victoria, no ha descartado su propia carrera electoral, señalando que la competición está lejos de concluir y que aún quedan numerosos estados por participar.
La campaña de reelección de Joe Biden ha afirmado que Trump tiene «prácticamente asegurada» la candidatura republicana, criticando su agenda como una continuación de políticas extremas que han afectado a los republicanos en elecciones anteriores.
En cuanto a la distribución de delegados, Trump ha asegurado 12, frente a los 6 de Haley, de los 22 disponibles en las primarias de Nuevo Hampshire. Para obtener la nominación republicana, se necesitan al menos 1,215 delegados.
Estas primarias son la segunda etapa en el proceso electoral republicano, tras los caucus de Iowa, donde Trump también lideró con un 51%. Sus competidores, Ron DeSantis y Vivek Ramaswamy, han suspendido sus campañas y respaldado a Trump desde entonces.
Por otro lado, Biden ha ganado las primarias demócratas en Nuevo Hampshire, a pesar de no haberse presentado oficialmente. Aunque estas primarias no serán reconocidas por el Comité Nacional Demócrata debido a la decisión de comenzar la temporada electoral en Carolina del Sur, los votantes tuvieron la opción de escribir su nombre en las papeletas.