El funeral en honor a las más de 200 víctimas de la DANA, celebrado este lunes en la Catedral de Valencia, ha reunido a 400 familiares y ha contado con la presencia de los Reyes de España, ministros del Gobierno central y el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón. Durante la ceremonia, el arzobispo Enrique Benavent ha destacado la solidaridad de los voluntarios y servidores públicos que asistieron en las labores de rescate tras la tragedia, subrayando su papel como un símbolo de esperanza. No obstante, la misa no estuvo exenta de tensiones por el malestar de algunos familiares hacia los políticos presentes.

La Asociación de Damnificados por la DANA Alfafar/Horta Sur expresó su rechazo a que el evento fuera aprovechado para “limpiar la imagen” de los representantes políticos. Tras la misa, un grupo de familiares increpó al presidente Mazón, recriminándole su gestión durante la catástrofe. Entre ellos, un joven entregó al presidente una fotografía de su padre fallecido con la palabra “asesino” escrita en el reverso. Otros familiares, como Sonia Fuster, decidieron abandonar la catedral en señal de protesta, argumentando que los políticos no habían estado a la altura de las circunstancias.

Presencia de familiares

Por su parte, los Reyes dedicaron tiempo al final del acto para consolar a los afectados, destacándose el caso de Ana y su hijo Eloy, quienes perdieron a su esposo y padre en Catarroja. Según Ana, el encuentro con los monarcas fue “reconfortante”, aunque insistió en que todavía hay mucho por esclarecer sobre la tragedia. Otro testimonio, el de Susana, quien perdió a su marido mientras intentaba salvar a una mujer, subrayó que muchas muertes podrían haberse evitado con alertas más tempranas.

La misa se desarrolló bajo un amplio dispositivo de seguridad que cerró los accesos al centro de la ciudad, generando concentración de manifestantes fuera del recinto, algunos de los cuales gritaron consignas como “Sánchez y Mazón, dimisión”. A pesar de las críticas, los Reyes fueron despedidos con aplausos tras finalizar su encuentro en el funeral con las familias afectadas por la DANA.