España hace historia de nuevo y jugará la final del Mundial femenino. El equipo dirigido por Jorge Vilda logró superar 2-1 a Suecia en un partido emocionante donde todo se decidió en los últimos minutos. Ahora aguarda, con esperanzas y optimismo, enfrentarse a Australia o Inglaterra en el partido definitivo para alzarse con su primer título del Mundial femenino.
Desde el comienzo, Vilda apostó por jugadores con experiencia como Irene, Jenni y Alexia, quienes dieron todo en el campo. A pesar de la presión y la táctica defensiva de Suecia, que se centró en mantener el balón fuera del alcance de España, las españolas demostraron madurez y valentía en cada jugada, desafiando los límites y a una árbitro que muchas veces demostró excesiva permisividad.
Segunda parte de emociones intensas
Aunque la primera mitad del encuentro se mantuvo reñida, con las defensas siendo las protagonistas, la segunda mitad trajo emociones intensas. Suecia mostró una fuerte presión al inicio, pero Vilda supo reaccionar a tiempo y cambió la dinámica del juego.
Alba, a falta de 20 minutos para el final, estuvo cerca de marcar, generando emociones fuertes en los aficionados. Sin embargo, fue Jenni quien, con una asistencia precisa, permitió a Salma anotar el primer gol. Aunque el VAR revisó la jugada, no hizo más que confirmar la ventaja española.
Suecia no se rindió y logró empatar el marcador con un gol de Blomqvist, tras una asistencia de Hurtig. Pero la noche estaba destinada a ser de España, y Olga, con un disparo majestuoso, selló el 2-1 definitivo que llevó al equipo a la ansiada final.
Tras siete intensos minutos de añadido, el pitido final confirmó lo que muchas soñaban: España estará en la gran final del Mundial femenino, haciendo historia y demostrando una vez más su capacidad y pasión por el fútbol.