El Congreso de los Diputados de España se prepara para reconocer a Edmundo González Urrutia como presidente electo y legítimo de Venezuela, en una decisión que se formalizará este miércoles con el respaldo de la mayoría absoluta de los diputados. Esta medida, impulsada por el Partido Popular (PP), contará con el apoyo de Vox, UPN, Coalición Canaria (CC) y el Partido Nacionalista Vasco (PNV), lo que garantiza un mínimo de 177 votos a favor. Sin embargo, se prevé que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y sus socios de investidura voten en contra, a excepción del PNV, que en esta ocasión ha decidido alinearse con los populares.

El debate ha generado tensiones en el hemiciclo, especialmente con la presencia de Carolina González, hija del líder opositor Edmundo González, asilado actualmente en España. El PP, a través de su portavoz Cayetana Álvarez de Toledo, ha planteado la votación como una elección entre «dictadura y democracia», criticando al PSOE por no respaldar el reconocimiento explícito del liderazgo de González Urrutia. Álvarez de Toledo calificó la posición del PSOE como una muestra de «falta de firmeza» frente a la represión del régimen de Nicolás Maduro, instando a los socialistas a «optar entre la verdad y la democracia o la mentira y la dictadura».

Voto en contra del PSOE

Por su parte, el PSOE ha tratado de presentar una postura matizada, rechazando la represión y violencia del régimen de Maduro, pero evitando el reconocimiento expreso de Edmundo González Urrutia como presidente legítimo de Venezuela en el Congreso. Los socialistas propusieron una enmienda para «analizar las consecuencias» de dicho reconocimiento, pero esta no será aceptada. En su lugar, el PSOE ha subrayado su apoyo a las labores de mediación del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, quien ha trabajado en favor de la liberación de presos políticos y el diálogo entre el Gobierno venezolano y la oposición. Sin embargo, esta postura recibió duras críticas del PP, que considera que los socialistas están rindiendo homenaje a un «claro aliado del régimen chavista».

Respaldo del PNV

El PNV, que tradicionalmente ha mantenido una posición crítica hacia el régimen de Maduro, ha decidido respaldar la propuesta del PP en esta ocasión. Aitor Esteban, portavoz del PNV, defendió la necesidad de «optar entre la democracia y la dictadura» y subrayó el respaldo de su partido a la oposición democrática venezolana. Esteban insistió en que el reconocimiento de González Urrutia es una manifestación de apoyo a los derechos humanos y a la lucha democrática en Venezuela.

Cristina Narbona, diputada del PSOE, defendió la posición de su partido afirmando que «nadie ha hecho más que el PSOE por el pueblo venezolano». Narbona destacó que Pedro Sánchez ha liderado a los países de la Unión Europea en una postura que no reconoce a Maduro, pero que tampoco admite la victoria de González Urrutia de forma definitiva. Argumentó que no se deben «generar falsas expectativas» sobre el efecto de un reconocimiento de González Urrutia, recordando el caso de Juan Guaidó, cuyo reconocimiento internacional no cambió la situación política en Venezuela.

Desde China, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, defendió el asilo concedido a González como un «gesto de humanidad» y anunció que se reunirá con él a su regreso a España. Fuentes del Ejecutivo han acusado al PP de utilizar la situación en Venezuela como «arma arrojadiza» contra el Gobierno, subrayando que «la política exterior la marca el Gobierno» y que el reconocimiento del Congreso de Edmundo González no determinará la posición oficial de España.